QUE ES LO ACADÉMICO EN POLÍTICA.
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En el mundo físico todo tiene una explicación: las nubes, los planetas, el agua, el sol, todo. Cada día nuevas cosas son comprendidas dentro de las leyes y hasta se hacen nuevas leyes ampliando el panorama. En biología también aunque las explicaciones pueden ser más complicadas. Entonces los trabajos científicos, académicos, tienen un sentido indiscutible. Así y todo la ciencia va de apoco contestando las preguntas y siempre surgen nuevas. En ciencias políticas no hay leyes generales. Sólo indicaciones imprecisas, muy útiles, pero no me permiten predecir con certeza. Es un difícil arte más que una ciencia, pues intervienen muchísimas variables en los fenómenos.
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La ciencia me dice que el día 14 de octubre de 2014 aparecerá el cometa Haley visible en la tierra y se verá desde…. Etc. La ciencia predice. La política solo puede decir “probablemente…” porqué no hay leyes. Los artículos académicos en política, hacen los estudios más serios, estudian detalles, reúnen información de otros casos históricos, opiniones de otros analistas, emplea un lenguaje más técnico y difícil para el no técnico. Como no es una ciencia, las conclusiones académicas no creo que sean mucho más válidas que las de un buen analista sin título, que emplea un lenguaje corriente. Esta es mi creencia porqué nunca leí un estudio serio de las predicciones en política.
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Entonces pienso que el estudio da a los académicos la habilidad para analizar más seriamente los temas políticos, pero emplean un lenguaje más difícil para la gente y no creo que más acorde con la realidad. Lo que deberíamos descartar o al menos mirar con mucha desconfianza, son las opiniones vertidas desde una posición de fanatismo o las que tienen profundas cargas emocionales o bien las que provienen de creencias inculcadas en la infancia.
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Mi conclusión a nivel de opinión es que los estudios y análisis políticos pueden ser buenos o malos, acertados o no tanto, hacer buenas predicciones o no, sin importar tanto los títulos académicos del analista sino de su capacidad para interpretar el arte de la política. Horacio.